Reina de Bettendorf, consejera honoraria (APTI)
Reina de Bettendorf fue subtesorera de la FIT (2012), tesorera (2013-2017) y vicepresidenta (2017-2022). Fue elegida consejera honoraria de la FIT en 2022.
Soy traductora de profesión. A lo largo de los años, he adquirido un poco de experiencia en la administración de pequeñas empresas y organizaciones. Además, tengo una personalidad que probablemente sería clasificada como Tipo A, si la frase todavía se usa. Soy fanática del orden y la eficiencia.
Me involucré casi por accidente en la administración de la asociación de traductores de mi país natal Panamá cuando mis colegas me pidieron ayudar a nuestra asociación a recuperarse de un periodo de exuberancia tropical que había socavado sus finanzas y puesto en peligro su futuro. Mi asociación me envió al Congreso Estatutario y Mundial de la FIT 2011 en San Francisco, para que pudiera ver cómo los adultos hacen las cosas. En San Francisco, tuve la enorme suerte de ser acogida bajo el ala de una de las directoras legendarias de la FIT. Ella apostó por mí y facilitó mi elección al consejo. Fui la primera consejera de un país visto por algunos como un remanso.
Pasé 11 maravillosos años ayudando en la gestión de la FIT, primero bajo la atenta mirada de otro director legendario con un don para los números, para luego hacer lo mismo por mi parte. Como subtesorera, y luego como tesorera de la Federación, me sentí profundamente responsable del bienestar financiero de la FIT. Hubo obstáculos periódicos en el camino, y en muchas ocasiones me acostaba en la noche preocupada por nuestra capacidad de financiar los programas ambiciosos que habíamos iniciado.
Aprendí mucho en el camino, por supuesto. Como asesora honoraria, es un alivio poder ofrecer mis opiniones basadas en mi experiencia y en mi recuerdo de situaciones que hemos enfrentado, sin tener el gran peso de la responsabilidad de implementar las recomendaciones que surgen de nuestros debates. No siento que me hayan jubilado. Más bien, me siento como una respetada persona mayor —bastante joven— que todavía puede compartir sus experiencias por lo que podrían valer. Estoy muy agradecida por la oportunidad de servir a la Federación, y feliz de continuar mi colaboración con ella.