por Alison Rodriguez, presidenta de la FIT
Cuesta creer que este sea mi último mensaje para Translatio como presidenta; estos tres años han pasado volando.
Cuando en mi primer mensaje como presidenta afirmé que el nuevo Consejo tendría «mucho por gestionar», no imaginaba hasta qué punto sería cierto. El camino ha sido más complejo de lo anticipado, y la fuerza y la resiliencia del Consejo han superado mis expectativas. Aunque establecimos objetivos ambiciosos –quizá demasiado–, nuestras prioridades son claras: visibilidad, comunidad sólida, longevidad y una profesión unida y sostenible de cara al futuro. En ese futuro, las asociaciones demostrarán un valor inigualable.
Este número de Translatio reúne esos temas estratégicos: la AIT, la Asociación de Traductores Jurados de Río de Janeiro (APT-Rio) y la AITI reafirman el valor de las asociaciones y la perdurabilidad de las relaciones sociales, así como su papel esencial para afrontar nuevos retos. También tenemos un excelente artículo sobre el International Forum on Translation and Interpreting 2025, organizado por la SCIT (miembro esloveno de la FIT); impresionante evento que reunió a más de 250 personas y reflejó el verdadero espíritu de la FIT: colaboración internacional, visibilidad y visión de futuro.
Hablando de futuro, el Congreso Mundial de la FIT está a la vuelta de la esquina, y nuestro tema, «Dominar la tecnología para forjar un futuro inteligente», no podría ser más oportuno. Habrá presentaciones y conversaciones reveladoras sobre el impacto de la IA, el cambiante panorama profesional y las maneras de dominar la tecnología para moldear el futuro incierto.
Aprovechen la oferta especial de inscripción del 7 al 27 de julio, abierta a todo el mundo, con una tarifa reducida. Corran la voz… ¡No se lo pierdan! Inscríbanse aquí.
Para finalizar, me gustaría reflexionar sobre lo más inesperado de este periplo. Nuestro mandato comenzó en 2022, cuando las tensiones globales resurgieron y, lamentablemente, en lugar de apaciguarse como esperábamos, se han acentuado. En un mundo cada vez más polarizado, nuestra federación sigue siendo apolítica, con miembros de todas partes del mundo. Les apoyamos incondicionalmente, y permanecemos unidos. Nuestra solidaridad profesional trasciende nuestra nacionalidad. Esta unidad es crucial para asegurar una representación global auténtica de la profesión y que nuestros miembros trabajen donde sea necesario. Somos imparciales, profesionales y reconocidos, no entidades políticas; somos el vínculo de comunicación vital que facilita la resolución de conflictos a través del diálogo y la diplomacia.
En estos tiempos convulsos, la FIT renueva su llamamiento a la protección de traductores/as, intérpretes y terminólogos/as que viven y trabajan en zonas en conflicto. Seguimos muy preocupados por la seguridad y el bienestar de colegas en esas regiones.
Con el mismo espíritu solidario, instamos a proteger y respetar periodistas, trabajadores humanitarios y personal médico, colegas profesionales cruciales para la comunicación, el apoyo y el fomento de la paz.
Nuestro tema del DIT 2025, «La traducción: forjemos un futuro en el que confiar», se hace eco del llamamiento a la paz y se alinea con las metas del Año Internacional de la Paz y la Confianza. El 30 de septiembre, les animamos a unirse para celebrar nuestra profesión. En septiembre comunicaremos los detalles sobre nuestro webinario DIT anual.
En mi primer mensaje, felicité al nuevo equipo y expresé mi entusiasmo por trabajar con él. En este último, expreso mi sincero agradecimiento a todas las personas que conforman nuestras Comisiones Permanentes y Grupos de Trabajo (SCTF) y Centros Regionales –donde realizamos gran parte de nuestra labor–, a miembros dedicados del Consejo de la FIT y a todas las asociaciones miembro que han participado en esta increíble aventura. Ha sido un privilegio trabajar con ustedes.
Les deseo una feliz lectura y, por adelantado, un muy feliz Día Internacional de la Traducción, que marcará el inicio del próximo mandato de la FIT.